Cuando tu lavadora no centrifuga, es normal que surjan dudas y preocupaciones, ya que este problema puede tener diferentes orígenes. Desde sobrecarga hasta averías mecánicas, es fundamental identificar la causa para poder solucionarlo y evitar que vuelva a suceder. En este artículo te explicaremos en profundidad por qué no centrifuga una lavadora, los pasos a seguir para arreglarla, y cómo prevenir este problema.

Causas comunes por las que una lavadora no centrifuga

1. Sobrecarga del tambor: un error frecuente

Una de las razones más habituales por las que tu lavadora no realiza el ciclo de centrifugado es la sobrecarga del tambor. La mayoría de las lavadoras están diseñadas para detectar cuando la carga es excesiva y evitar el centrifugado para proteger los componentes internos. Además, una distribución desigual de las prendas puede provocar un desbalance que detiene el tambor.

¿Qué hacer?

• Retira algunas prendas, sobre todo aquellas que sean más pesadas, como las toallas o mantas, y redistribuye la ropa en el tambor.
• Intenta siempre respetar el peso máximo recomendado por el fabricante para cada carga de lavado.

2. El filtro de la lavadora: la trampa del centrifugado

El filtro de la lavadora está diseñado para recoger restos de pelusas, objetos pequeños como monedas o botones, y evitar que estos bloqueen el sistema de drenaje. Sin embargo, si este filtro no se limpia con regularidad, puede obstruirse y evitar que el agua salga correctamente, impidiendo que el tambor pueda girar a las altas velocidades necesarias para el centrifugado.

Solución:

• Localiza el filtro de tu lavadora, que generalmente está en la parte inferior frontal, y retira toda la suciedad acumulada.
• Repite esta limpieza cada mes para asegurarte de que no haya bloqueos que afecten al proceso de centrifugado.

3. Falla en la bomba de agua: drenaje bloqueado

El correcto funcionamiento de la bomba de agua es esencial para que la lavadora expulse el agua durante el ciclo de lavado. Si la bomba está defectuosa o bloqueada, el agua no será drenada completamente, lo que impedirá que el tambor alcance la velocidad de centrifugado.

¿Cómo identificarlo?
Si tras el lavado todavía queda agua en el tambor, es muy probable que la bomba de agua esté fallando. En estos casos, lo mejor es revisar el estado de la bomba o contactar con un técnico para reemplazarla si es necesario.

Motivos técnicos por los que una lavadora no centrifuga

1. Fallos en las escobillas del motor: ¿qué son y cómo afectan?

Las escobillas del motor son pequeñas piezas que permiten que el motor de la lavadora funcione correctamente al permitir el contacto eléctrico entre las piezas móviles y fijas. Con el uso, estas escobillas pueden desgastarse, lo que afecta directamente al rendimiento del motor y, por lo tanto, al ciclo de centrifugado.

¿Cómo lo soluciono?

• Si el motor pierde fuerza o el tambor no gira a plena velocidad, puede que sea necesario reemplazar las escobillas del motor. Este trabajo requiere conocimientos técnicos, por lo que es recomendable que lo realice un especialista.

2. Problemas electrónicos: soluciones simples y avanzadas

Los sistemas electrónicos de las lavadoras modernas son complejos y gestionan todos los ciclos de lavado. Si el sistema falla o se desconfigura, puede provocar que la lavadora no inicie el centrifugado correctamente. En algunos casos, el panel de control puede quedarse bloqueado debido a un error temporal.

¿Qué hacer?

• Reinicia el sistema electrónico de tu lavadora. Apaga el aparato, desconéctalo de la corriente durante al menos 5 minutos y vuelve a encenderlo. Si el problema persiste, puede ser necesario revisar los circuitos electrónicos internos.

Soluciones adicionales cuando la lavadora no centrifuga

1. Revisar la puerta o tapa de la lavadora

Otra causa simple pero a menudo pasada por alto es el mal cierre de la puerta o tapa de la lavadora. Si la lavadora no detecta que la puerta está completamente cerrada, no iniciará el ciclo de centrifugado por motivos de seguridad.

Comprobación rápida:

• Asegúrate de que la puerta esté correctamente cerrada. Si el sensor de cierre de la puerta está fallando, la lavadora no recibirá la señal para iniciar el centrifugado. En este caso, podría ser necesario reparar o sustituir el sensor.

2. Nivelación de la lavadora

Una lavadora que no está bien nivelada puede generar problemas durante el centrifugado. Si la lavadora está inclinada o no está completamente estable, los sensores de movimiento pueden detectar un desbalance que impida que el tambor gire a las revoluciones adecuadas.

¿Cómo nivelar la lavadora?

• Usa un nivel de burbuja para asegurarte de que el aparato está perfectamente nivelado. Ajusta las patas hasta que la lavadora esté completamente horizontal.

3. Problemas con el tambor o la correa

Si el tambor de tu lavadora no gira en absoluto, podría haber un problema con la correa del tambor. Esta correa es la encargada de transferir el movimiento del motor al tambor, y si se rompe o se desgasta, el tambor no girará.

Reparación:

• Si la correa está rota o desgastada, necesitará ser reemplazada. Aunque este es un problema mecánico, puedes intentar realizar la reparación si tienes algunas habilidades básicas de bricolaje.

Cuándo llamar a un técnico especializado

Si has revisado todos estos puntos y tu lavadora sigue sin centrifugar, es probable que el problema esté relacionado con componentes más complejos, como el motor o la placa electrónica. En este caso, lo mejor es contactar con un técnico especializado para realizar un diagnóstico y una reparación adecuada.

Mantenimiento y consejos para evitar problemas de centrifugado

Para evitar que tu lavadora deje de centrifugar y prolongar su vida útil, te recomendamos seguir estos consejos de mantenimiento:

• Limpieza regular del filtro: Al menos una vez al mes.
• No sobrecargar el tambor: Respeta siempre el peso máximo de cada carga.
• Verificación del sistema de drenaje: Asegúrate de que el agua se drena correctamente al finalizar cada ciclo.
• Nivelación adecuada: Comprueba regularmente que tu lavadora esté bien nivelada para evitar desbalances durante el centrifugado.

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